Existen numerosas directivas de la Unión Europea que establecen requisitos específicos para productos en diferentes sectores, y que requieren el marcado CE para demostrar el cumplimiento con esas normas. Estas directivas abarcan una amplia gama de productos, desde maquinaria industrial hasta productos electrónicos, dispositivos médicos, productos de construcción y más.
Algunas de las directivas de marcado CE más conocidas y relevantes en diferentes industrias son:
Directiva de Equipos a Presión (2014/68/UE)
Directiva de Dispositivos Médicos (93/42/CEE)
Directiva de Productos de Construcción (89/106/CEE)
Directiva de Máquinas (2006/42/CE)
Directiva de Compatibilidad Electromagnética (2014/30/UE)
Directiva de Baja Tensión (2014/35/UE)
Directiva de Productos de Cosmética (76/768/CEE)
Directiva de Aparatos a Gas (2009/142/CE)
Directiva de Instrumentos de Medición (2014/32/UE)
Estos son solo algunos ejemplos, y hay muchas otras directivas que abarcan una variedad de productos y sectores. El marcado CE es una forma de indicar que un producto cumple con los requisitos de seguridad, salud y protección del medio ambiente establecidos en las directivas correspondientes. Cada directiva tiene requisitos específicos que deben cumplirse para obtener el marcado CE y poder comercializar los productos en el espacio económico europeo.
Es importante destacar que las regulaciones y directivas pueden cambiar con el tiempo, por lo que os recomendamos consultar con un experto para obtener la información más actualizada sobre las directivas de marcado CE.
